Junio es el mes de la salud masculina Por ISABELLE MERCADO
Recuerdo a un hombre que ante mis ojos era un superhéroe, todo lo podía, era amoroso, vigoroso, siempre alerta, amaba su trabajo, a su familia y gozaba de buena salud, mi padre. Todos conocemos a un hombre así, aunque desafortunadamente con el tiempo su salud va mermando y deja de hacer cosas que antes podía realizar fácilmente.
Este mes de junio, en el que se celebra el Día del Padre y el Mes de la Salud en los Hombres, resulta una buena oportunidad para hacer conciencia sobre ello y volverlo una tendencia. Y ya sea que se trate de tu padre, hermano o amigo, todos los hombres deberían conocer la importancia de cuidar su salud. A diferencia de las mujeres, los hombres visitan menos al médico, lo que implica en muchas ocasiones que no detectan enfermedades hasta que ya es muy tarde. Entre las principales causas de muerte en hombres alrededor del mundo, están las enfermedades del corazón, enfermedad pulmonar y cáncer de pulmón y de próstata.
En hombres de más de 60 años, el aneurisma de la aorta abdominal es la mayor causa de muerte súbita, y el riesgo aumenta si se trata de hombres fumadores, por lo que se recomienda hacerse un examen para determinar si tienen algún padecimiento. Este mes y todos los demás debemos hacer conciencia de la importancia de cuidar a aquellos caballeros que ocupan un lugar especial en nuestra vida y orientarlos para que ellos mismos se cuiden desde temprana edad. Es injusto para todos perder a un importante miembro de la familia por falta de información o de prevención.
Los hombres y el COVID-19
Durante la pandemia por COVID-19 tanto hombres como mujeres estamos expuestos a contagiarnos, los datos que se han ofrecido a nivel mundial de contagios indican que los casos entre hombres y mujeres son muy parejos; sin embargo la tasa de mortalidad indica que fallecen más hombres que mujeres, aunque aún se desconoce la causa, se dice que se debe a la inmunología basada en el sexo, las mujeres tienen un sistema inmune más fuerte. Es importante poner especial atención en adultos mayores o personas con afecciones cardiacas, con enfermedad pulmonar, con un sistema inmune bajo, con obesidad grave, hipertensos, con diabetes y con enfermedad hepática pues su riesgo de infección es más alto.