¡A JUGAR LOTERÍA!
Sabemos por los cronistas de la época virreinal que la lotería era un juego popular en México desde hace al menos 300 años. Aunque todavía se juega lotería principalmente en las casas, en aquellos tiempos se le solía jugar en las plazas y ferias donde la gente se congregaba alrededor de mesas para jugar y escuchar los versos de quien cantaba las cartas. Al final del juego, los ganadores se llevaban premios de loza, vasos, jarras y hasta bacinicas.
La baraja de la lotería consta de 54 cartas con imágenes que se han vuelto icónicas en México: el gallo, la calaca, la sirena, el nopal… Se juega con tablas que reúnen 16 de estas imágenes en combinaciones distintas. Lleva el juego un “cantador” o “gritón”, que generalmente era un poeta popular que declamaba coplas tradicionales para cada carta. Tras escuchar estos versos, los participantes marcaban con frijoles las imágenes que aparecían en sus tableros y quien las tuviera todas marcadas primero ganaba. La lotería ha sido motivo de inspiración para artistas y poetas populares, que producen nuevas versiones de las imágenes o de los versos que se cantan al jugar. Aquí compartimos algunas coplas tradicionales de lotería recopiladas en 2005 por el profesor Samuel Juárez Martínez, quien entonces vivía en Tamaulipas, México y tenía 89 años de edad. La muerte La muerte siquiriflaca Montada en su burra flaca El árbol El árbol de la esperanza Que de venir no se cansa La estrella La estrella polar del norte Que no deja de brillar El cantarito Todo cabe en un jarrito Sabiéndolo acomodar En la comunidad latina de Alaska, el juego de lotería sigue vivo. Lina Mariscal, por ejemplo, juega lotería con su nieto todos los domingos. “Lo juego para mantener viva la tradición, para enseñarle vocabulario y para entrenar su memoria, como en los flashcards o el bingo que se juegan en los Estados Unidos”. |