Para nadie es un secreto que “las posiciones que tiene el gobierno federal no son a favor de los inmigrantes mexicanos”, señaló Roberto Dondisch, cónsul de México en Seattle, durante su reciente visita a Anchorage. Pero el consulado que Dondisch preside puede apoyar a los cerca de 21,000 mexicanos que viven en Alaska en cuestiones de protección migratoria, documentación, educación, salud y cultura.
En materia migratoria, el consulado cuenta con un programa a través del cual algunos abogados ubicados en Alaska podrán defender a los mexicanos vulnerables a una deportación. Dondisch explica que en este programa se hace un análisis socioeconómico del interesado. Y si la persona no tiene recursos, el gobierno de México puede cubrir el costo del servicio legal. Para los mexicanos que quieran repatriarse, el gobierno de México ha implementado el programa Somos Mexicanos, que apoya en materia de educación, acceso a oportunidades de trabajo, protección de derechos humanos, entre otras necesidades básicas. Dondisch explica que si los migrantes no tienen familia en México, este programa “les puede ayudar para que tengan a dónde llegar”. El consulado también puede apoyar a las familias que busquen repatriarse para que no se les cobren impuestos en México al cruzar su ajuar doméstico por la frontera. Para los niños y jóvenes que han estudiado en Estados Unidos y que regresan a México el gobierno mexicano ha hecho una reforma de ley a través de la cual sus estudios podrán revalidarse al cien por ciento. Además, algunas instituciones de educación superior, como la Universidad Iberoamericana, o el Tecnológico de Monterrey, ofrecen becas para que los DREAMers puedan continuar sus estudios. Con respecto a la ola de racismo contra los mexicanos que se ha suscitado durante la presente administración, Dondisch explica que “la retórica política que se usó en las campañas es inaceptable. Es una forma de no reconocer que gran parte del valor y la riqueza de los Estados Unidos es gracias a las manos mexicanas”. A quienes enfrenten algún tipo de discriminación por su origen mexicano, el equipo de Protección del consulado puede apoyarlos en sus gestiones con las autoridades locales. El Departamento de Protección también puede acercarlos a organizaciones que los ayuden, como por ejemplo el Anti-Defamation League, con la cual el gobierno de México ha establecido un acuerdo de apoyo en estos temas. Dondisch señala: “Es importante entender que el consulado no es una autoridad aquí. El consulado es una autoridad mexicana, y podemos hablar con las autoridades locales para pedirles que den seguimiento a los casos. Trabajamos a través de las policías locales, estatales, de los gobiernos… Muchas veces el que nosotros le hablemos a un jefe de policía es una forma de que ellos sepan que el consulado está dando seguimiento y que la persona no está sola”. Sobre la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Dondisch explica que para el gobierno de México lo que sucede con el TLCAN no se reduce a la discusión sobre el acuerdo comercial. “Es un acuerdo que hicimos hace 23 años. Son 23 años de ir juntos, de ser compañeros”. Lo que sucede con el TLCAN habla de la temperatura de la relación entre los gobiernos de México y Estados Unidos. Sin embargo, Dondisch recuerda, “los gobiernos federales de cualquier país son pasajeros, pero la gente no. Hay 32 millones de mexicanos en Estados Unidos. Cada vez hay más mexicoamericanos, y cada vez hay más americanos viviendo en México. Son casi dos millones con visas, más lo que están viviendo sin documentos”. Dondisch considera al muro en la frontera de México y Estados Unidos que la presente administración se ha propuesto construir como “una señal de si queremos estar juntos o estar divididos. A Estados Unidos le conviene tener un México amigo; a México le conviene tener un Estados Unidos amigo”. Dondisch es enfático de la voluntad del gobierno de México de seguir estando cerca de los Estados Unidos. Y concluye: “México considera que no hay que hacer muros; hay que hacer puentes” para promover un entendimiento cada vez mayor entre los dos países. |