La desinformación durante los brotes de enfermedades es un problema. La viruela símica no es la excepción por campbell small
La Organización Mundial de la Salud advirtió a la comunidad internacional y declaró a la viruela símica como una emergencia de salud pública el 23 de julio de 2022. Luego, el 4 de agosto de 2022, el gobierno de Biden la declaró una emergencia de salud pública nacional en EUA. Esto puede sonar muy parecido al principio de la pandemia del COVID-19. Por suerte, los expertos dicen que no es igual.
Documentada por primera vez en 1958, la viruela símica es una enfermedad viral que se transmite a través del contacto cercano con piel infectada, materiales contaminados o gotas en el sistema respiratorio. La enfermedad puede causar una variedad de síntomas, incluyendo lesiones comparadas con ampollas y espinillas. A pesar de esto, existen vacunas para mitigarla. Cuando emergió el COVID-19, en 2020, no había tratamiento para la enfermedad, debido a que era nueva. Además, era mucho más transmisible y más propensa a causar fatalidades que la viruela símica.
A pesar de esto, y de la misma manera que se reportó en este periódico durante el apogeo del COVID-19, vivimos en una infodemia, un término definido por la Organización Panamericana de la Salud en 2020 como el hecho de que vivimos en una era de elevado acceso a la información, la cual no siempre es verdadera o precisa, lo que hace encontrar información fidedigna bastante difícil. Este problema no se puede ignorar. Especialmente durante brotes de enfermedades, dado que hay una correlación entre el incremento de ansiedad durante crisis de salud, y la acción de compartir desinformación. De hecho, de acuerdo con la OMS, en los primeros tres meses de la pandemia del COVID-19, casi 6 mil personas fueron hospitalizadas debido a la desinformación sobre el virus. Esto es un problema y, a pesar de que muchos culpan al internet, realmente no es un problema nuevo.
Consideremos la epidemia del VIH. Hubo mucha desinformación. Un mito, por ejemplo, era que solo los hombres gays podían contraer la enfermedad. Esto es falso. La verdad es que, aunque en 1995, de acuerdo con la British Academy, 1 de cada 9 hombres gays habían sido diagnosticados con SIDA y 1 de 15 habían muerto por la enfermedad, una encuesta de la CDC muestra que las personas heterosexuales también pueden contraer la enfermedad. En 2019, hombres que tuvieron relaciones sexuales con otros hombres representaron 69% de los nuevos casos de VIH, pero 23% de los casos ese año fue de individuos heterosexuales. De acuerdo con la CDC, esto se debe a que el sexo anal incrementa el riesgo de contraer VIH.
Un escenario similar está pasando con la viruela símica hoy. Como se dijo previamente, la transmisión ocurre por contacto cercano con piel infectada, lo que puede pasar durante las relaciones sexuales. De acuerdo con información de la CDC del 12 de agosto de 2022, de los casos actuales de viruela símica en EUA, 99% de los casos han ocurrido en hombres, 94% reportó contacto íntimo o encuentros sexuales con otros hombres. Estas estadísticas son muy parecidas a las obtenidas durante la epidemia del VIH. Es importante notar que, a diferencia del VIH, no hay evidencia científica de algún comportamiento sexual que incrementa la posibilidad de contraer viruela símica.
El desafío de los oficiales de salud pública es informar a un grupo que históricamente ha sido marginalizado sobre una enfermedad que los afecta de manera predominante sin sugerir que es una enfermedad directamente asociada con ellos. No existen las “enfermedades gay” pero si hay enfermedades que son más transmisibles entre hombres que tienen relaciones sexuales con otros hombres. Todos tenemos que poner de nuestra parte en este desafío. Además de la infodemia, vivimos en un ecosistema mediático centrado en la internet, la cual no es buena para comunicar matices. La gente está incentivada a compartir la información para ser oída entre miles de millones, y los mensajes más precisos no son siempre los que son escuchados. Normalmente, son los que evocan miedo y odio. En el caso de la viruela símica, estos están tomando la forma de información falsa que dice que es una enfermedad solo para los hombres gay, o teorías conspirativas que las vinculan con la vacuna del COVID-19. Por eso el alfabetismo digital es esencial en estos momentos. Vivimos con una sobrecarga de información y debemos saber discernir entre lo que dicen los expertos y las opiniones de las demás personas.