NUEVAS MEDIDAS ANTI-COVID
Hasta el pasado 15 de noviembre, Alaska lleva contabilizados más de 22,014 infectados y 98 muertes. El día anterior, sábado 14 de noviembre, el número de casos nuevos ha superado la cifra más alta de contagios en un día. De los 745 casos reportados, 433 son en Anchorage.
El coronavirus está atacando con más fuerza desde hace varias semanas. El Departamento de Salud y Servicios Sociales ha alertado al gobernador, Mike Dunleavy, del peligro de un colapso hospitalario ante el ingreso de más personas enfermas rebasando así, los récords máximos del estado. Lo peor está por llegar La inminente llegada del invierno y el recrudecimiento del frío hace temer lo peor. Dunleavy ha pedido a la población que tome al virus muy en serio y que siga estrictamente las instrucciones de los funcionarios de salud. El gobernador amplió la declaración de emergencia de desastre del estado, después de que los funcionarios de la salud pública expresaran su preocupación ya que esta declaración expiraba el domingo 15 de noviembre. De poco sirve que Alaska haya tenido hasta ahora una de las tasas de mortalidad más bajas de todo Estados Unidos, si el ritmo de contagios se sigue acelerando como en las últimas semanas. Se considera que la tasa de transmisión de la enfermedad es alta cuando supera el 5%. Actualmente esta tasa casi ha llegado al 9% (8,9%) en el estado, y a 14% en Anchorage. Quinn-Davison toma medidas más duras La alcaldesa en funciones de Anchorage, Austin Quinn-Davidson, ha anunciado medidas más duras de prevención frente a los contagios. Se eliminan las exenciones de llevar cubrebocas y se limita aún más el número permitido en reuniones sin comida ni bebida, de los 30 de antes a sólo 15 ahora, salvo en lugares de culto, como las iglesias. Se reduce la edad a partir de la cual es obligatorio llevar cubrebocas. Anteriormente éstos eran obligatorios para los niños a partir de los doce años; ahora lo son para los mayores de cinco y se recomienda que también lo lleven a partir de los dos años. El cubrebocas también es obligatorio para las personas que hacen ejercicio en interiores (antes estaban exentos). Quienes no puedan tolerar su uso por razones médicas u otras razones tendrán que llevarlo de todas formas, a no ser que sea imposible. Los protectores faciales no pueden sustituirlos, salvo para quienes no puedan trabajar con seguridad con un cubrebocas, como los conductores que usan gafas y se les empañan. Los funcionarios de salud pública temen que con este ritmo de contagios la capacidad de los hospitales de Alaska llegue al tope máximo y no puedan ingresar a nadie más, lo que provocaría más muertes. Incluso temen que falte personal en los refugios médicos de emergencia. En una conferencia de prensa el viernes pasado se instó a los residentes de Anchorage a hacerse la prueba de Covid, con o sin síntomas, y aún sin haber sido expuestos a alguien con Covid. Se debe tener claro que el virus está en todas partes, es necesario cerciorarse de no estar infectados y en caso de estarlo tomar las medidas necesarias para mitigar el contagio de más gente. Las pruebas son gratuitas y existen varias ubicaciones en donde puede hacerse la prueba sin bajar del auto. Solo necesita registrarse previamente en www.visithealth.covidsecureapp.com |